martes, 29 de abril de 2014

Brownies party fest y ¡pobre nuestro idioma!

Ya que estamos, ponemos todo el título en inglés, total... pobre nuestro idioma español. Tan rico en palabras y expresiones, sinónimos, antónimos y todos esos ónimos que aprendimos en la primaria. En los teclados le mezquinan la Ñ hermosa ¡su símbolo! Ni qué decir de los signos de abrir las exclamaciones y las preguntas... si existen ¿por qué no los ponemos? ¿Será que "inglesamos" todo? Que las "cookies", los "cupcakes", los "popcakes", los "squars", los "butter-no-sé-cuánto" y qué se yo cuántos anglicismos más para nombrar masitas o galletas, tortitas o chupetines de torta o la deliciosa crema de manteca. 
Me obligo a usar los signos de entonación, ambos, para que ninguno de los dos se sienta discriminado y cuando comencé el blog fue uno de mis desafíos: acordarme del signo de abrir ¿¡


Y abriendo el signo ¡Qué rico es el brownie! Uso la palabra inglesa o estadounidense o norteamericana (porque americanos somos todos desde Alaska hasta Tierra del Fuego) porque es una preparación clásica ¿o cómo se diría empanada, mate o locro en inglés?


Y otra acotación más. El 1 de mayo se celebra el día internacional de los Trabajadores, así que, amigas y amigos de todo el mundo ¡que tengan un feliz día! A disfrutar pues lo merecemos. 


Y qué tal para el festejo este delicioso y ¡la pucha si es fácil de hacer! brownie. Solo mezclar y mezclar, nada más.

Estos son los ingredientes 
(para una placa de 20 x 20)

Chocolate (la tableta de Águila está bien)       80 g
manteca/mantequilla                                       80 g
huevos                                                             3
azúcar                                                          200 g
harina 0000                                                    90 g
cacao puro (no vale el nesquik)                      15 g
nueces picadas (opcional)                               60 g

Así se hace:

Primero lo primero, cernir la harina con el cacao. Reservar. Segundo lo segundo, picar el chocolate bien finito. Poner en un bol y calentar en baño María o al microondas hasta que se forme una crema deliciosa, se deben fundir perfectamente el choco con la manteca. La manteca se va a derretir antes que el chocolate. Mezclar muy bien. Reservar.  Y tercero, batrir los huevos con el azúcar, un poco más que romper los huevos, no debe hacer mucha espuma, dicen los expertos. Y ahora si, mezclar la preparación de chocolate con la de huevos, agregar las nueces y por último la harina. Mezclar muy bien y colocar en una placa enmantecada y si hay ganas, forrada con papel manteca enmantecado por favor porque sino, no se despega. Habló la voz de la experiencia. 
Cocinar en horno a 170 °C por alrededor de 40 minutos. Otros expertos dicen que al pinchar con un palito o cuchillo, éste debe salir como si a la mezcla le faltaran 5 minutos de cocción. O sea, un poquiiiiiito de masa pegada al palo.
La textura propia de esta masa es muy húmeda y hasta cremosa, se podría decir. Si lo querés un poco más esponjoso, agregale una cucharadita de café de bicarbonato de sodio a la harina antes de cernirla. Y tené cuidado porque así crece demasiado (volvió a hablar la voz de la experiencia).


Con peras al malbec y una generosa cantidad de helado de crema americana

 Sean felices ¡que es gratis!

☺♥








jueves, 17 de abril de 2014

Niditos de lemon curd y merengue para Pascuas

Ya estamos en Semana Santa. Muchas recetas, mucho chocolate pero ¿prestamos atención al verdadero motivo de esta semana? 

En la página Facebook de Lluvia de rosas (en honor a Santa Teresita del Niño Jesús) escribieron este texto que me movilizó mucho y se los comparto:


Miércoles Santo.

Te condenan Jesús...
En esta noche que comienza quiero hacer un ramillete espiritual...dejar a tus pies mis actitudes que te condenaron en el día de hoy. Hacer una lista en mi corazón de los gestos de desprecios, gestos pocos generosos entregados a nuestros hermanos o de una mirada poco cristiana al no ayudar al que transita a nuestro lado en la vida, en el correr de cada día a día...Huellas de un Dios ausente en medio del pueblo. Y una vez más buscamos crucificarte....

Me quedé pensando el tamaño desmesurado que debe tener mi ramillete.. ¡perdón, Señor, perdón!

A los que celebran la Semana Santa acompañada de la Liturgia, les deseo que estos días cargados de sentimiento les lleguen al corazón (y a mi también) y que podamos, por fin, resucitar a una vida nueva en el Espíritu Santo en el día de Pascua. 

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Y como después de la mística viene la mástica, se me ocurrieron estas tortitas para regalarle a mi querido Padre Adrián Bonetto que ahora está lejos, en Almafuerte y que si Dios quiere, pronto lo vamos a tener cerquita cerquita (gente de Almafuerte no me odie, por favor, que solo es un deseo).


Ingredientes para tres tortitas:

3 cupcakes (yo usé tortitas de unos 6 cm de diámetro)
3 chupaletas con motivos pascuales
3 cucharadas generosas de lemon curd (abajo pongo la receta)
merengue italiano o suizo de 2 claras
peladillas (de las de Navidad) todo sirve ¿vió?

Así se hacen

Se ahuecan las tortitas y se rellenan con el lemon curd, se les retira el sobrante a la tapa y se tapa la crema. Se coloca el merengue en una manga (también se pueden hacer con cuchara) y se le da la forma de nido. Quemé con el soplete para que se parezca más a un nido y planté la chupaleta, puse las peladillas y ¡voilá! así quedaron los nidos



Les cuento que el lemon curd es una crema riquisísima de orígen inglés que en el idioma original significa "cuajada de limón".



Es muy fácil de hacer y se hace en un periquete en el microondas. Si en casa no existe este adminículo cocineril, se puede hacer al baño maría y cocineras expertas aseguran que sale mejor aún.

A mi me apeteció hacerlo de manera acelerada, por esta cuestión de los tiempos que corren a toda velocidad y este fue el resultado...


3 huevos
100 g de azúcar común
el jugo de 2 limones
la ralladura de la cáscara de uno de esos limones
50 g de manteca/mantequilla


Cabe destacar que busqué un millón de recetas en la web y al final, terminé personalizando una..
puse casi todo en un bol apto para microondas, lo del casi es porque a la manteca la puse al final, pero otras cocineras ponen todo junto. 
Fui cocinando de a 30 segundos porque tenía miedo que estallara esta mezcla, o se quemara o se derramara y escaseaban las ganas de limpiar... La mezcla se fue haciendo grumos que rompía con la cuchara de madera cada vez que retiraba el bol del micro. Así me llevó unos cuatro minutos hasta que se hizo una crema tipo pastelera. Consistente y homogénea. Ahí agregué la manteca (mantequilla) cortada en cuadraditos bien chiquitos y batí como una loca para deshacerlos. La crema quedó más brillante y con un sabor delicioso. No sabía si comerla a cucharadas aun caliente o envasarla en frascos estériles para guardar para otro momento. Y bue... primó la cordura y envasé la crema. Me salieron dos tarritos de unos 100 g. Esos en los que vienen los dulces del sur y que valen una fortuna que parece que en lugar de trozos de fruta tuvieran pepitas de oro. Dicen que dura unas dos semanas bien refrigerada.. No sé.. Si alguien prueba, que me  avise... 


Si no vuelvo con otra receta, que pasen una espiritual y productiva Semana Santa y una ¡muy feliz Pascua!

Que el Señor los bendiga y cuidado con el colesterol y el chocolate :)



domingo, 6 de abril de 2014

Ravioles rellenos de ricota y limón

Hoy es domingo, está nublado y a veces llueve. Lejos de la melancolía, lo que tengo es sueño, pero antes de dormir la siesta debo dejar constancia de estos ravioles que saben a gloria. De verdad, los sabores explotan en la boca e inundan los sentidos Sorprende la combinación de sabores. Si es en buena compañía, mucho mejor.


Aunque, debo admitirlo, me equivoqué de salsa. y es que durante la semana tengo tanto trajín que me resulta difícil organizarme con las compras y tener en la alacena y en la heladera esos pequeños tesoros que hacen de la comida cotidiana un bocado exquisito...
Por eso tengo que agudizar la imaginación, pienso que así habrán hecho nuestras abuelas y ¿por qué no, mi madre? en épocas de escasez. Y así, estoy segura, salieron delicias de las alacenas pobres y las cocinas ávidas de alimentar a la familia. 

Ingredientes abundantes para dos comensales:

Masa

Harina integral 150 g
huevos 1 y medio
sal 1 cucharadita
ralladura de medio limón
aceite de oliva 1 cucharada

Relleno

Ricota blanda 150 g
medio huevo
nuez 1
ralladura de limón 1 cucharadita
sal y pimienta a gusto

Así se hacen:

Lo primero: cascar los huevos en un recipiente y batirlos. Separar un cuarto de esa cantidad y reservarlo. Acto seguido, hacer una corona en la mesa y agregar todos los ingredientes. Amasar, hacer un bollo bien liso y dejar reposar unos veinte minutos. Mientras tanto, hacer el relleno.
Cuando pasó el tiempo, estirar la masa y dejarla muy finita. Si la estirás con el palo, como me tocó a mi (no vale la pena bajar, desembolsar, ensuciar y limpiar minuciosamente la Pastalinda para tan poca cantidad), de paso, ahorramos en el gimnasio... jeje
dejamos reposar la masa para que se oree un poco. Tarea extra difícil con 80% de humedad.. Lo intentamos.

Mientras descansa nuestra masa, hacemos el relleno. Colocamos la ricota en un bol, le agregamos el medio huevo que habíamos reservado, picamos la nuez en trozos bastante grandes para que se sienta al masticar, rallamos el limón, condimentamos y mezclamos. 

Cuando todo está listo, hacemos montoncitos de relleno en una de las láminas de masa, rociamos con agua para que se peguen bien y tapamos con la otra lámina. hacemos presión alrededor del relleno para adherir perfectamente las masas, cortamos de la forma deseada, puede ser con cortapastas de alguna forma en particular, de acuerdo a los comensales o cuadrados con la ruedita, si no hay ruedita, con cuchillo. ¡No hay excusas! 
Calentamos agua, la proporción es 1 litro de agua por cada 100 g de pasta con un puñado de sal, sin exagerar. Cuando el agua hace borbotones colocamos los ravioles en la olla y cuando suben, esperamos 2 minuto y los retiramos con espumadera y mucho cuidado. Colocamos en la salsa y servimos.


En mi caso los acompañé con pechuga de pollo salteada con verduras a la que después le agregué un salsa portuguesa, pero me parece que una salsa de varios quesos o crema infusionada con cáscara de limón y tomillo irían de maravillas. 

Espero que los hagan y me cuenten.

¡Que tengan una semana de abundantes bendiciones!

Sean felices